miércoles, 28 de marzo de 2012

La niña de ocho años, ocho años mayor...

Juego, río, canto, sueño...
como cualquier chica de mi edad, me comporto como una niña ocho años menor, poco me interesa si lo tomas en cuenta, pero da lo mismo, yo sé que a ti no te molesta...
porque pienso como adulta, y comparto tus ideas,sueños y metas como nadie más los comparte.

Pero hay algo en mí, que me hace ser así, algo me cambió, me marcó y no sé que es, pero espero descubrirlo pronto, por que si no, jamás podré ser lo que quieres, lo que pides con tantas fuerzas, lo que yo por ahora no te puedo dar.

Ser niño tiene sus ventajas, por que me vas a cuidar y a proteger, tiene sus desventajas, por que nunca me podrías ver.

Infierno...

Gritas, gritas y no dejas de gritar, ya no te soporto, deseo borrarte por completo de mi vida.
Que mal que no puedas ver con buenos ojos a quien te llena de satisfacción y debería llenarte de orgullo, más no es así...

Te fascina alabar a quién no se lo merece, ponerle una corona de laureles a quien no se la ha ganado y preferirle por encima de mí.

Pero es por eso que yo no mato las ilusiones de salir adelante, de que, aunque me quede "sola", por lo menos habré triunfado y conseguido lo que yo quería, con todas las ganas que hay en mi ser.

Me harta tener que hacer caso de lo que diga la gente, para poder quedar bien, y he decidido ponerle un hasta aquí, la gente no me paga porque yo me comporte bien o mal, ni a la gente le debe de interesar lo que yo haga y a mí me vale lo que piensen, estoy muy segura de quién soy, que es lo que quiero, a donde voy & como lo conseguiré.

Hay una posible cura para mi "mal", un salón de clase, con chicos a los cuales compartirles lo que sé, por que ver sus caras al escuchar y prestarme un poco de atención con lo que les explico no tiene precio, no hay nada en el mundo, para mí, que valga tanto como eso; porque, estar enfrente de ese salón me hace sentir viva, con ansias de vivir, de saber que se puede llegar muy lejos. No hay enojo, ira o rencor, todo eso desaparece cuando estoy enfrente de eso chicos, siento como si nunca hubiera tenido un vacío en toda mi vida... sólo cuando estoy enfrente de ellos.